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Phantom Abyss, el multijugador asíncrono de saqueo de templos, se ve invadido por espíritus merodeadores en su última actualización, disponible hoy mismo en Steam. Invasion, la nueva actualización, pone toda la carne en el asador con nuevos enemigos, nuevas reliquias, más fantasmas y todavía más trampas. Para celebrar la salida de este ominoso nuevo contenido, Phantom Abyss es una de las ofertas del fin de semana en Steam desde el 23 de septiembre hasta el 27 de septiembre con un 25% de descuento.
Ahora aquellos que se internan en los templos solo encuentran un único camino hacia el Infierno, las almas perdidas están confinadas y acompañan a los jugadores desde el momento en el que ponen un pie dentro. Dentro de las salas de reliquias, que podrán encontrarse en diferentes ruinas y cavernas, ahora se podrán hallar múltiples reliquias, sin embargo los jugadores pueden verse así mismos con las manos vacías si otros saqueadores más afortunados les arrebatan sus trofeos. No obstante ahora el Infierno guardará la clave para liberar todos los fantasmas y sellar un templo para siempre.
Los nuevos obstáculos que los jugadores encontrarán incluyen cuchillas verticales giratorias, nuevas velocidades y nuevos patrones para los troncos rodantes, nuevas secciones de deslizamiento así como nuevas y flamantes trituradoras, pero eso no es todo: las nuevas Homing Bombs perseguirán a los jugadores elegidos y explotarán al impactar. Mientras que los retorcidos Defensores estiran astutamente sus cadenas mientras sueltan golpes a diestro y siniestro contra cualquier torpe jugador que ose acercarse lo suficiente. Floating Bombs y Dart Mines completan los peligrosos añadidos que los templos poseen, asegurándose que todas y cada una de las carreras sean: ¡más peligrosas que nunca!
Phantom Abyss continuará expandiéndose en su etapa en Early Access, añadiendo progresivamente nuevas cámaras, trampas, látigos y características adicionales al gameplay. Para más información, lánzate a visitar phantomabyss.com, una página web con un valor histórico tan grande que debería estar expuesta en un museo.
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